Las mangueras de freno reforzadas le permiten controlar más claramente el proceso de frenado. Se basan en una construcción multicapa: un sándwich. Trenza de PVC que brinda protección contra la suciedad y el agua. Trenza trenzada de acero que aporta rigidez a la manguera. Un tubo de plástico que aporta rigidez y no reacciona químicamente con el líquido de frenos. Gracias a este diseño, la manguera de freno reforzada puede soportar cualquier caída de presión, así como hacer frente a una carga dinámica activa, evitando el proceso de deformación. La rigidez estable de las mangueras crea una fuerza lineal clara en el pedal del freno, lo que le permite dosificar con precisión el proceso de frenado. La previsibilidad de la presión del líquido de frenos también tiene un efecto positivo en la velocidad de reacción de los sistemas antideslizantes y antideslizantes del vehículo.
Todas las mangueras de freno reforzadas de Rotora se prueban a más de 200 atmósferas, superando los requisitos más estrictos del DOT estadounidense. Para su comodidad, se incluyen todos los elementos de fijación necesarios para la instalación. El cumplimiento exacto de las especificaciones originales, así como una verificación exhaustiva de la instalación de las mangueras de freno, le permite obtener un producto que no requiere modificaciones ni modificaciones en su automóvil. Rotora produce internamente una variedad de sujetadores, lo que garantiza la conveniencia de instalar mangueras reforzadas Rotora en lugares regulares.
Al comprar latiguillos de freno reforzados de Rotora, obtiene la máxima calidad y eficiencia.